La existencia de una deuda que trepa a más de G. 65.466 millones por el consumo de agua potable que mantienen desde hace varios años atrás entes públicos y municipios de todo el país, entre ellos la propia Comuna capitalina, fue divulgada ayer por el presidente de la Essap, arquitecto Ludovico Sarubbi.
“Estamos tratando de llegar a un acuerdo o caso contrario nos veremos obligados a cortar el servicio”, resaltó. La deuda histórica de la entidad se viene arrastrando durante más de 10 años, aseguró.
Por otra parte, se refirió a la deuda que tiene la Comuna capitalina, que supera los G. 12.193 millones, indicando que buscará dialogar sobre el tema con el intendente Mario Ferreiro para ver en qué forma se abona la misma, para lo cual se remitirán todos los informes sobre el caso.