Tras la toma del colegio República Argentina de Asunción por parte de los alumnos que exigen la renuncia de la ministra Martha Lafuente, el agente fiscal Emilio Fuster, que llegó hasta el lugar, manifestó que no encontró ningún hecho de violencia en el lugar y dio por terminado su trabajo.
Explicó que fue convocado por la Policía Nacional y tomaron la decisión de derribar la puerta de la institución para verificar la situación.
Una vez adentro, no constató ningún acto de violencia por parte de los jóvenes y que la manifestación es pacífica. “Todo el mundo tiene derecho a manifestarse de acuerdo a la Constitución Nacional”, indicó.
Apuntó que ahora el caso queda en el ámbito administrativo, en manos del Ministerio de Educación y Cultura.
“La propia ministra debería conversar con ellos. No sé de qué se trata la reivindicación de estos chicos, pero queda en ámbito de ellos”, sentenció.
Los alumnos siguen atrincherados en varias aulas de la institución y continúan las negociaciones con las autoridades que llaman al diálogo y que liberen la institución.
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