La cancha (césped) del Presbítero Bartolomé Grella sufrió algunos cambios a fin de que sea habilitado para jugar partidos de Copa Libertadores. Por estas obras “se tuvo que romper el campo de juego y eso lastimosamente perjudicó”, explicó.
En charla con Fútbol Club, por radio La Unión y Unión TV, precisó que las lluvias continuarán hasta antes del inicio del partido y definitivamente el campo de juego se verá afectado.
“El partido es hasta las 19:00 horas, hay tres horas de diferencia, quizás logren sacar un poco de la agua acumulada. El campo de juego va a estar muy blando, se va a resquebrajar y partir en todos los pedazos que pisen los jugadores”, aseveró.
Consultado de si se podría suspender el cotejo, respondió que “no hay antecedentes de que se haya suspendido un partido de Primera División”.