A una ciudad alemana le preocupó tanto que decidió instalar semáforos en el suelo.
El servicio municipal de la sureña ciudad de Augsburgo instaló el sistema en dos paradas de tren después de ver algo similar en la ciudad de Colonia.
“Vamos a monitorear los resultados y ver si menos personas caminan sobre la luz roja”, dijo Jürgen Fergg, portavoz del servicio municipal de Augsburgo.
El sistema se colocó después de que un adolescente resultó gravemente herido en un accidente cuando llevaba los auriculares.
Las luces cuestan unos 10.000 euros por pieza. Aunque algunos se quejan sobre el precio, Fergg dijo que el costo es “justificado en comparación con el daño que se puede prevenir”.
Aunque la solución parece simple –los peatones solo tendrían que mirar hacia arriba- la distracción de los viandantes se ha convertido en un problema peligroso en los últimos años.
Un estudio de 2013 del estado de Ohio encontró que el número de personas heridas al caminar usando sus teléfonos se más que duplicó desde 2005 a 2010, con más de 1.500 peatones que tuvieron que ir a la sala de emergencias.
La Navidad pasada, un hombre cayó por un precipicio y murió en San Diego cuando caminaba distraído por un dispositivo electrónico.
Fuente: CNN