“Hay tres tipos penales en esta causa, que son difamación, calumnia e injuria. En ese proceso, se le absolvió de culpa y pena a Chilavert en lo que respecta a calumnia e injuria. Se le confirmó lo de la difamación, pero eso está pendiente todavía de una casación ante la Sala Penal o una acción ante la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia”, dijo Marinoni en conversación con Buenas Tardes La Unión por Unión TV y radio La Unión.
En ese sentido, comentó que su cliente fue privado de ciertas pruebas de la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero (SEPRELAD) que determinaban que reportó operaciones sospechosas contra Alejandro Domínguez, pero esas “nunca nos facilitaron”. Por este motivo, anunció que planteará un recurso de casación ya que “atenta contra el principio constitucional de igualdad”.
Además, Marinoni citó que a Chilavert no se le permitió acceder al extracto de pago de impuestos de Domínguez. Sin embargo, el titular de la CONMEBOL sí accedió a la del exportero. “Domínguez mintió en el juicio al decir que gana US$ 22.000, cuando hay pruebas de que gana US$ 44.000”, dijo.
Añadió que los 12 tweets en los cuales Chilavert acusó a Domínguez de “corrupto”, en los cuales la querella se basó para su argumento, “fueron publicados desde Buenos Aires (Argentina), por lo cual, por principio y garantía de jurisdicción, él tenía que haber sido juzgado en Buenos Aires, no en Paraguay”.
Incluso, advirtió que, tengan o no éxito ante la Corte, recurrirán a instancias internacionales porque “existen preceptos constitucionales que se violentaron en ese proceso”.
La sentencia en contra de Chilavert se emitió en mayo pasado por difamación y fue ratificada esta semana.