Desde la noche del lunes, un amplio dispositivo de seguridad había rodeado la residencia del expresidente. Finalmente, y tras haberse declarado listo para colaborar con las autoridades estadounidenses, el exmandatario fue detenido y esposado de manos y pies a la entrada de su casa.
El operativo de captura, encabezado por el ministro de Seguridad, Ramón Sabillón, tendría como primer objetivo llevar a Hernández a declarar ante el juez que ordenó su detención. El expresidente había dicho horas antes en un mensaje difundido en redes sociales que estaba listo para dar sus declaraciones ante la Justicia.
Más temprano, el exmandatario (2014-2022), quien dejó la presidencia en enero, aseguró que colaboraría con la justicia para responder a las acusaciones desde Washington por narcotráfico y uso o posesión de armas de fuego, en un proceso que, según su defensa, podría tardar meses.
Hernández será presentado la mañana del miércoles en una primera audiencia ante un juez donde se le leerán los cargos en su contra y se determinará el lugar donde cumplirá el arresto mientras dure el proceso de extradición.
Con información Reuters, EFE y medios locales.