Ante nuevas evidencias, la Red Nacional de Servicios de Sangre podrá trabajar con donantes en un periodo de tiempo menor tras la vacunación anti COVID-19, contacto cercano a casos positivos o recuperación de la enfermedad.
“Diciembre, enero y febrero suelen ser nuestras etapas más complicadas porque, por lo general, la gente está metida en otras actividades. Ahora esto se suma al COVID, porque la gente tiene miedo de ir a donar sangre porque piensa que se va a contagiar”, expresó la Dra. Elsi Vargas, directora del Centro Nacional de Servicios de Sangre (CENSSA), en diálogo con Nuestra Mañana por La Unión.
Instó a la ciudadanía a conscienciarse a donar sangre dos veces al año y hacerlo “un estilo de vida”. Afirmó que de esa forma se irá erradicando la ilegal venta de sangre.