“Nosotros nos encontrábamos haciendo un recorrido en la zona del centro y justo pasamos por una calle principal. En ese momento, vemos que una madre a gritos estaba pidiendo auxilio porque tenía un problema con su pequeña. Cuando vemos la situación, mi compañero desciende del móvil, la subimos a la madre y a la nena, que ya estaba desvanecida con el pulso muy bajo, y le hicimos primariamente el RCP (reanimación cardiopulmonar)”, relató la oficial Laura Pagani, agente de la Policía Municipal de San Miguel, en diálogo con Nuestra Mañana por La Unión.
Indicó que, de momento, es desconocida la razón por la cual la nena se estaba ahogando. El hecho sucedió el domingo pasado en la localidad de San Miguel, Provincia de Buenos Aires, Argentina.
Aunque Pagani comentó que “fueron dos minutos que se hicieron eternos”, tomando en cuenta que el centro de salud se ubicaba a ocho cuadras de distancia, destacó que el trabajo en equipo haya concluído de manera satisfactoria con la salvación de la vida de la niña.
A su vez, Diego Villegas, el oficial que conducía el móvil policial, comentó que durante su carrera profesional ha protagonizado hechos similares, pero es la primera vez en la que debió salvar la vida a una niña.
“Nosotros la dejamos en el hospital, pero ya perdimos contacto con la madre. Por lo que vimos en redes sociales, ellas ya volvieron a su casa”, comentó.
Más allá de que Villegas haya señalado que simplemente puso en servicio todo lo que aprendió, es resaltante y para aplaudir la valentía y rapidez con la que actuó tanto él como su camarada para salvarle la vida a la nena.
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