El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, arribó a la 01:10 de la mañana al aeropuerto internacional de Ezeiza. El mandatario aterrizó en suelo argentino luego de su histórica visita a Cuba, desde donde partió a las 16:20 del martes (hora local). La llegada de Obama a nuestro país también representa un cambio significativo en las relaciones bilaterales con Estados Unidos, ya que hace casi 20 años que un presidente de ese país no es recibido por su par argentino.
El último encuentro oficial entre los presidentes de Argentina y Estados Unidos tuvo lugar en octubre de 1997, cuando Bill Clinton se reunió con el entonces presidente Carlos Menem. En 2005, George Bush estuvo 36 horas en nuestro país para participar de la IV Cumbre de las Américas, pero en esa ocasión no hubo un encuentro bilateral.
En esta oportunidad, Barack Obama fue recibido por la canciller Susana Malcorra. Según la agenda preliminar, entre las 10 y 11 de la mañana tendrá lugar el encuentro con Mauricio Macri, en la explanada de la Casa Rosada que da a la avenida Rivadavia. Allí se concretará la reunión entre ambos presidentes, y otra entre funcionarios de ambas comitivas. A su término,Macri y Obama brindarán una conferencia de prensa en el Salón Blanco.
El tránsito en la zona está interrumpido ya que se organizó un imponente operativo de seguridad.Según precisaron fuentes oficiales a Infobae, la estadía de Obama en la Ciudad y Bariloche demandará la custodia de 1200 efectivos de la Policía Federal. Además, contarán con apoyo de la Gendarmería, Prefectura y la Policía de Seguridad Aeroportuaria. Paralelamente al operativo de las fuerzas nacionales que custodiarán a Obama, el Servicio Secreto norteamericano seguirá bien de cerca al mandatario, con aproximadamente 300 agentes que estarán en alerta.
La avenida 9 de Julio –desde antes del aterrizaje– ya ofrecía un panorama inusual ya que por allí debía pasar el presidente de los EEUU a bordo de “La Bestia”, una limusina equipada con extremas medidas de seguridad. En consecuencia, el tránsito estuvo cortado y sólo algunos transeúntes pudieron presenciar de cerca el recorrido de la imponente caravana. Luego, Obama también avanzó por la avenida Libertador junto a una comitiva compuesta por casi 40 vehículos. A las 2 en punto de la madrugada, el mandatario llegó a la embajada de los EEUU para descansar unas horas.
Fuente: Infobae.com