Las mujeres contaminadas con el virus Zika pueden seguir amamantando a su bebé, pues nada prueba que haya riesgo de transmisión, declaró el jueves la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Según las pruebas existentes, los beneficios de la lactancia materna para el bebé y la madre superan cualquier riesgo de transmisión del virus Zika a través de la leche materna”, concluye la OMS en sus recomendaciones dirigidas a las autoridades de los países afectados por la epidemia.
El virus Zika, transmitido por el mosquito tigre, provocaría la microcefalia (malformación de la cavidad craneal, nefasta para el desarrollo intelectual) en los recién nacidos, y el síndrome de Guillain-Barré, enfermedad neurológica que puede generar una parálisis irreversible o la muerte.
La OMS recordó que el virus fue detectado en la leche materna de dos madres contaminadas. “Pero no hay actualmente ninguna prueba de una transmisión de zika a bebés a través de la lactancia materna”, subraya. La epidemia de Zika, que se desarrolla sobre todo en América Latina, “podría empeorar antes de mejorar”, advirtió el miércoles en Río de Janeiro el director general de la OMS, Margaret Chan.
Brasil tiene ya más de millón y medio de casos desde 2015 y la OMS teme una propagación “explosiva” en las Américas, con 3 milones a 4 millones de casos este año. No existe de momento ninguna vacuna ni tratamiento contra este virus, pero dos vacunas parecen prometedoras: una desarrollada en Estados Unidos y otra por el laboratorio indio Bharat Biotech