“Nosotros estamos tratando de identificar al agresor, se está tratando de obtener los datos”, afirmó la fiscal del caso, Stella Maris Ramírez, en conversación con La Unión.
En ese sentido, dijo que el niño fue atendido por el médico forense de turno de la Fiscalía, quien constató los golpes en la cabeza. Así mismo, señaló que el nene es adicto a las drogas y requiere de atención médica, por sufrir raquitismo, así como odontológica. “El nene estaba en el programa PAINAC (Programa de Atención Integral a los Niños, Niñas y Adolescentes que Viven en la Calle), pero estaba en situación de calle. Hay que saber por qué otra vez se hallaba en esa situación”, expuso, añadiendo que en su declaración el menor afirmó que sustrajo una banana de un vendedor ambulante, quien lo persiguió y le propinó una salvaje golpiza.
En cuanto al agresor, Ramírez dijo que “de vista todos le conocen al agresor”, ya que se trata de un vendedor ambulante que siempre circula la misma zona. No obstante, se está recabando más datos para identificarlo.
También señaló que la madre del chico vive en un asentamiento en extrema pobreza en los alrededores de la capital departamental; mientras que el papá, en un barrio de la misma ciudad. Señaló que ambos serán imputados por incumplimiento del deber de cuidado en flagrancia.
Será el Ministerio de la Niñez el que disponga a dónde será trasladado el niño para que reciba atenciones y dónde vivirá.