“No es una farmacéutica, es una empresa importadora la que solicitó el registro sanitario. Es la vacuna rusa la que pidió importar”, explicó Gamarra en conversación con La Unión.
No obstante, dijo que la farmacéutica en cuestión no cumplió con la presentación de todas las documentaciones, a lo cual se comprometió a entregar en la brevedad posible.
Gamarra aseveró que, para que una vacuna reciba la aprobación de DINAVISA, debe cumplir con ciertos requisitos muy exigentes por ser de origen biológico, como por ejemplo presentar una ficha técnica detallando posibles efectos adversos y un plan de gestión de riesgos.