“En comparación al año pasado, los números son negativos, pero sí, hubo un pequeño aumento en cuanto al consumo”, dijo Alberto Sborovsky, presidente de CAPASU, en conversación con La Unión.
Indicó que la peor parte del año para los supermercadistas se registró entre los meses de abril y mayo, durante la cuarentena total. No obstante, resaltó que en un gran porcentaje los empresarios del rubro lograron mantener los empleos e incluso se han desarrollado y perfeccionado ciertos aspectos de logística.
En otro orden, Sborovsky destacó el trabajo de la Unidad Especializada contra el Contrabando, a cargo de Emilio Fuster. En contrapartida, dijo que, como el trabajo es muy grande debido a que está “industrializado” el paso de productos extranjeros sin documentos a través de las fronteras, es necesario que esta dependencia sea convertida en secretaría.
Por otro lado, el titular de CAPASU destacó el programa “Bolsa Navideña”, que está siendo muy aceptado por los clientes y que cuenta con un precio de G. 29.000, conteniendo productos típicos muy consumidos de esta época del año, como pan dulce, turrón y sidra.