“El proceso fue sobre la base de la sospecha de un hecho punible, que luego se comprobó y posteriormente derivó en la condena de Roberto. Ronaldo aceptó haber usado ese documento público de contenido falso y eso es delito”, explicó Gustavo Amarilla, juez del caso, en diálogo con La Unión.
Indicó que el Ministerio Público fue el que solicitó la suspensión de la condena a prueba para Roberto, quedando con antecedentes penales, debido a que fue comprobado que en su celular se encontraron mensajes que daban cuenta de que él sabía de la utilización de documentaciones de contenido falso. En contrapartida, Ronaldinho recibió la suspensión condicional del procedimiento, que es “una salida más benévola”, dejándolo sin antecedentes.
Amarilla argumentó que tanto Ronaldinho como Roberto fueron sometidos a un proceso penal porque fue comprobada su comisión del hecho punible de uso de documentos públicos de contenido falso, por lo cual desembocó en una condena sobre ambos.
No obstante, aseveró que una cuestión que llama la atención es por qué motivo tanto Ronaldinho como su hermano querían el sello de entrada al país en sus documentaciones de contenido falso. “Eso es lo que no cierra y hace que me pregunte por qué”, dijo el magistrado, aunque aclaró que, como juez Penal de Garantías, no puede inmiscuirse en esa investigación fiscal.
De hecho, dijo que el exfutbolista aceptó haber utilizado esas documentaciones, que incluían pasaportes originales de contenido falso. Por ejemplo, en el documento de Ronaldinho figuraba que él era “paraguayo naturalizado”.
El exastro del fútbol brasileño donó la suma de US$ 90.000, de los cuales US$ 60.000 irán al Hospital de Clínicas y los restantes US$ 30.000 irán a la campaña Todos Somos Bianca. Por su parte, Roberto pagó US$ 110.000.
El caso
Ronaldinho y su hermano Roberto de Assis Moreira ingresaron el pasado 4 de marzo a nuestro país. Pocas horas después, fueron descubiertos que ambos utilizaron pasaportes paraguayos de contenido falso.
Por esta razón, los brasileños fueron imputados y llevados presos en la sede de la Agrupación Especializada por el plazo de un mes. Posteriormente, consiguieron obtener prisión domiciliaria, fijando residencia en un hotel del centro de Asunción. Luego de seis meses de estar en nuestro país, los hermanos abandonarán Paraguay rumbo al Brasil.
La empresaria que trajo a ambos hermanos, Dalia López, supuestamente en el marco de un “evento benéfico” y para la presentación de un libro de autoría del exfutbolista, está prófuga y con orden de captura nacional e internacional.