Juan Grassi, dueño del restaurante La Tarantella y vocero del sector, afirmó que el éxito que se pueda obtener en esta Fase 3 dependerá del “compromiso de todos”, incluyendo no solamente de los propietarios de los restaurantes y sus empleados, sino también de los mismos clientes. “Creemos que así como nos comportamos en estos 96 días de cuarentena, así vamos a continuar”, confía.
El protocolo al ingresar a locales consiste en el lavado de manos, pisar la alfombra desinfectante, uso de tapabocas todo el tiempo, no habrá manteles en mesas, solo individuales de papel; llamar antes de ir al local para reservar, de lo contrario, formará fila; no pedirán cédula de identidad, pero si nombre y número de teléfono. También agregó que no existirá tiempo máximo de permanencia.
Como solamente servicios de delivery estaban habilitados para los restaurantes en esta cuarentena, Grassi señaló que, así como muchos negocios culinarios fueron perjudicados, varios otros se vieron fortalecidos y sacaron provecho, ya que “tenían mucho expertiz en lo que refiere a delivery”. “En nuestro caso, tuvimos una caída del 70% en ventas. Ese 30% salvamos con los delivery”, aseveró en diálogo con La Unión.
Grassi estima que el 40% de los restaurantes se reactivarán desde hoy. Sobre el punto, dijo que esto se produce porque hay locales que prefieren reabrir solamente cuando acabe la cuarentena por la pandemia del coronavirus, mientras que otros analizarán el movimiento de gente para reiniciar trabajos.