Los delicuentes eran aproximadamente 13 vestidos de camuflaje, habrían quemado un retiro y mataron 10 vacas, según informaciones de los pobladores.
El establecimiento pertenece al ganadero brasileño Jorge Zanetti.
Ya fue atacado en varias ocasiones por el EPP.
En 2008, quemaron topadoras, y en el 2010 protagonizaron un enfrentamiento que dejó cuatro personas muertas, tres de ellas prestaban servicios en la estancia Santa Adelia.