La intervención del puente abarcó principalmente la limpieza y reencauce del Arroyo Mburicaó; que a raíz del último acontecimiento climático se vio sobrepasado por la gran cantidad de sedimentos que fueron arrastrados.
Igualmente se trabajó en la contención de los estribos del puente hasta altas horas de la noche y fueron sellados con hormigón los sitios de fuga abiertos tras el temporal, que ocasionaron la pérdida del material de relleno que sostenía parte de la vereda afectada.
Posteriormente se hizo la carga del ripio para reemplazar el relleno perdido, que luego fue compactado hasta alcanzar el nivel de base para la vereda, y se sumó la reparación de una sección de tuberías que también se vio afectada por el desmoronamiento.