“Fue un susto la tormenta que cayó ayer. No duró mucho, pero fue intensa en el breve tiempo que pasó”, dijo João Roberto Ferreira, intendente de Bahía Negra, en diálogo con La Unión.
En ese orden, el jefe comunal señaló que en el casco urbano fueron 8 las familias afectadas por la tormenta, cuyas casas fueron destruidas, además de también familias indígenas que residen en las afueras del municipio. Así mismo, dos pabellones de colegios fueron totalmente destechados. Sobre este caso, afirmó que el fenómeno meteorológico sucedió en horario de clase, pero que “por suerte no hubo lesiones para los alumnos”.
Fotos: Gentileza.
Ferreira anunció que solicitarán ayuda a la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) para asistir a los ciudadanos damnificados y también insumos para reparar los daños materiales.