“Que estos condenados sean enviados bien lejos, cerca de cuarteles. Que el Estado solamente les provea de carne y que el resto de alimentos ellos se produzcan, hasta pueden crearse su propia panadería”, detalló Ortiz en comunicación con La Unión, afirmando que los presos, en otros países, realizan estos trabajos.
Ortiz propone que los cerca de 3.000 condenados que actualmente forman parte de la población penitenciaria paraguaya sean enviados a “lugares bien lejos”, citando como ejemplo Mayor Pablo Lagerenza, Departamento de Alto Paraguay, a aproximadamente 750 kilómetros de Asunción, cerca de la frontera con Bolivia.
“Imagínense que 3.000 o 4.000 presos sean trasladados de las penitenciarías de Tacumbú y Emboscada. Va a descomprimir bastante”, aseguró.
El diputado liberal considera necesaria y urgente la aplicación de la medida para evitar que episodios como los sucedidos el pasado domingo en la penitenciaría de San Pedro, donde se produjo un motín que arrojó como resultado 10 presos muertos, se repitan. En ese sentido, calcula que mediante pedido “llave en mano” ya podría contarse con esa penitenciaría ya en menos de un año.