Tras tres allanamientos, también fueron incautados el arma de fuego y la motocicleta utilizados en el hecho, cuyo conductor, que prestó el biciclo, aún no fue capturado y continúa su búsqueda. Así mismo, el dueño de la moto tampoco aún fue detenido.
En la balacera murieron Íker Salinas (4) y Gabriel Salinas (22). El padre del menor y hermano del joven, Eliel Salinas (25), se halla internado en grave estado en el Hospital Regional de Pedro Juan Caballero. Los tres se hallaban a bordo de una motocicleta.
Según explicó el comisario Rafael González, jefe de investigación de delitos del Departamento de Amambay, explicó que los dos adolescentes detenidos confesaron que el tiroteo tuvo como trasfondo el reparto del botín de un asalto a una casa de cambios en Ponta Porã, Brasil.
En ese orden, señaló que por esta razón habrían reaccionado disparando contra los ocupantes del biciclo. “El tío, que iba como acompañante, fue el que más impactos de bala recibió, porque fueron disparados de hacia atrás. Lastimosamente una de las balas le traspasó e impactó en la cabeza del niño, quien falleció en el lugar”, comentó el uniformado en diálogo con La Unión.
Tomando en cuenta que los autores son menores de edad, la expectativa de pena por asesinato solo va hasta 8 años de prisión. No obstante, podrían acentuarse considerando que ambos ya poseen antecedentes por homicidio.