La mayor preocupación estaba en el Departamento de Ñeembucú, el más castigado por las anegaciones, donde afortunadamente no se registran altos números negativos.
No obstante, Martin aseveró que, debido a las inundaciones, no se podrá concretar el objetivo trazado de llegar al 75% de vacunación del hato ganadero contra la fiebre aftosa, lo cual se tenía planeado para el período a comenzar este 20 de mayo. “Nos limita totalmente esta situación y apenas, si es que no hay contratiempos, podremos cubrir el 30%”, dijo.