“Tengo reclamos de mi hija, ella está peor que yo (…) Su gato le comió el audífono. No logra domesticarle”, expresó Cubas en conversación con La Unión y que en eso ayudará.
En ese orden, aseveró que durante sus dos meses de suspensión hará de “guía familiar”, ya que asistirá también a su otro hijo y a sus nietos. No obstante, dejó en claro que no descuidará las tareas legislativas.
Consultado sobre sus exabruptos y repentinas reacciones, que últimamente se tornaron violentas, subrayó en todo momento que no forman parte de un libreto, sino que son producto de circunstancias contra la corrupción.
Con relación a la sanción que le fue aplicada, cuestionó que parte de la acusación para castigarlo con suspensión de funciones sin goce de sueldo hayan sido incluidas “cosas por las que ya me habían juzgado”.
El pleno de la Cámara de Senadores suspendió al senador Paraguayo Cubas. La sanción de 60 días sin goce de sueldo fue solicitada por el senador colorado Juan Carlos Galaverna, quien durante la sesión fue agredido por el parlamentario esteño, cuando este le derramó agua de una botella al momento en que hacía uso de la palabra. El legislador de la ANR había planteado este castigo en apoyo al presidente del Congreso, Silvio Ovelar.