De acuerdo a investigaciones, celulares conseguidos a través de asaltos y robos fueron comprados y adulterados en “San Miguel” para su posterior venta. “Son flasheados y revendidos a menor precio que el original”, expuso la fiscal Carmen Gubetich, quien encabezó el operativo, detallando que el trabajo se realizó en base a cerca de 3.500 denuncias de robos de estos dispositivos móviles en distintas dependencias policiales de Asunción y área metropolitana.
La agente comentó que quedó detenido Juan Carlos Mendoza, uno de los dueños del local. Además, también son buscadas otras dos personas. En ese orden, dijo que todos serán investigados por los hechos punibles de “adulteración de una propiedad intelectual” y reducción.