Una de las obras realizadas por el grupo Latido Americano en Asunción hace un año, fue totalmente desplazada por una propaganda política de los precandidatos a senador y diputado, Carlos Núñez Agüero y Carlos Viveros.

El hecho causó el enojo masivo en redes sociales, el repudio se trasladó hasta el lugar de los hechos, donde estaba el mural; un grupo de jóvenes colocó carteles con mensajes de reproche hacia la actitud de los políticos. Hasta el mismo lugar llegó Viveros, en un intento por aclarar la situación, pero su argumento no convenció.

Tras colmar la poca paciencia que le tuvieron los protestantes, Carlitos Viveros fue corrido del lugar al grito de “¡fuera stronista!”.

Carlos alcanzó a explicar en el momento, que el muro se ubica en una propiedad privada, y dijo que pertenece a su familia, concretamente a “una tía mía”. Además, señaló que parte del mural ya se había derrumbado, versión cuestionada y expuesta también en las redes sociales.

https://twitter.com/mijailmt/status/917735139102253057

Viveros había dicho que la obra que se expuso como comparación (foto de portada) pertenece al archivo de la municipalidad, de cuando la pintura estaba recién hecha por el artista, y que actualmente la obra ya no lucía igual. No obstante, en la foto “de archivo” se notan grietas e imperfecciones en la pared, y las mismas permanecen hasta hoy, ya con la propaganda política, detalle curioso si se tiene en cuenta la versión de que el muro se había derrumbado y vuelto a recomponer.

Este no es el primer hecho polémico protagonizado por quien ansía convertirse en legislador, hace meses, el mismo apareció disfrazado del dictador Alfredo Stroessner, posando junto a otro joven que lucía un uniforme nazi.

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