Las manos son nuestra herramienta de vida, con ellas, trabajamos, nos alimentamos, manejamos, manipulamos el celular, entre otras cosas. Precisamente por eso, las mismas se convierten en el principal vehículo de contagio de muchas enfermedades.
Una persona con gripe puede expandir fácilmente el virus si al momento de estornudar se cubre con las manos, con las cuales más tarde tocará otras superficies de la casa o la oficina y terminará contaminando todo.
La influenza se transmite a través de minúsculas e invisibles gotas húmedas que se generan cuando el enfermo las expulsa al hablar, estornudar o toser. Estos agentes quedan en el ambiente si el paciente no se tapa correctamente con un pañuelo o con el brazo.
El Ministerio de Salud Pública recomienda lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón, especialmente al llegar de la calle o entrar en contacto con dinero y otras cosas.
Asimismo, limpiar y desinfectar las superficies y objetos de uso común como el escritorio, el teléfono, el teclado de la computadora, el celular, etc.
Además, quien está enfermo debe evitar compartir artículos personales como cubiertos, bombillas y vasos. En lo posible no acudir a lugares de gran aglomeración como supermercados, shoppings y locales comerciales en general.
La medida impostergable es consultar al médico que recetará el medicamento correspondiente acompañado de un reposo para prevenir la dispersión del virus.
FUENTE: HOY.COM.PY