Vladimir Jara, Director de Comunicaciones del Ministerio del Interior, informó en comunicación con La Unión R800 AM que autoridades de esta cartera de Estado se encuentran en territorio brasileño en apoyo a la policía brasileña, que está en busca de los presuntos integrantes del grupo criminal Primer Comando da Capital (PCC) que asaltaron esta madrugada el local de Ciudad del Este de la empresa aseguradora Prosegur. “Todo el armamento que utilizaron es de uso militar”, manifestó.
Indicó que maneja la información de que tres miembros de esta banda fueron abatidos. Así mismo, extraoficialmente señaló que ya fueron capturados cuatro bandidos. Detalló que los enfrentamientos se generaron luego de que los delincuentes cruzaron desde Santa Fe del Paraná a São Miguel do Iguaçu, a través del Lago Itaipú. “Más allá de estos resultados, aún continúan encontronazos, persecuciones y balaceras en la zona de Itaipulândia, cerca de Foz de Yguazú”, añadió.
Además, afirmó que fueron incautadas dos camionetas utilizadas para la fuga, los cuales serían blindados. Así mismo, aseguró que fueron incautadas ametralladoras, proyectiles, chalecos antibalas, explosivos, salvavidas y cargadores de municiones, agregando que claramente el objetivo del asalto a la sede de Prosegur en Ciudad del Este fue planeado con mucho tiempo de anticipación.
Armas y elementos incautados por la policía brasileña en la zona de Itaipulândia durante el operativo contra los asaltantes a la sede de Prosegur de Ciudad del Este. / Fotos Twitter: @minteriorpy.
Relató que es difícil para los policías brasileños capturar a los maleantes debido a que estos cuentan con varios vehículos, con lo que aprovechan para huir por distintas direcciones.
Para el operativo, se unieron fuerzas de la Policía Federal, Policía Militar y Policía Civil.
Jara aseveró que tanto el Ministro del Interior, Lorenzo Lezcano, como el Comandante de la Policía Nacional, Luis Rojas, se encuentran en el lugar.
Con respecto al dinero robado, indicó que aún no se tiene información sobre su paradero, el cual consistiría en un botín de US$ 40 millones, que, de confirmarse, sería el mayor monto recaudado en la historia del Paraguay.